Tras concluir la IX Cumbre de Líderes de América del Norte, Canadá, Estados Unidos y México, se presentó una declaración conjunta sobre los avances y los planes acordados en diversas reuniones sostenidas.
Luego de la reunión trilateral en Washington DC, la primera desde 2016 entre los tres países, se presentó la declaración conjunta “Reconstruyendo mejor juntos: Una América del Norte segura y próspera”.
Uno de los apartados de la declaración fue titulado “Migración, desarrollo y una América del Norte segura”, que aborda los factores que han provocado el incremento de la migración, y los retos de salud, económicos, de derechos humanos y de seguridad que viven los países de origen.
Se planteó la importancia de atender las causas de origen de la migración a través de la inversión en estas regiones, priorizando la cooperación para el desarrollo con el fin de crear oportunidades económicas que beneficien a todos.
“Nuestra intención es trabajar juntos para enfrentar este reto en nuestro hemisferio. Reafirmamos nuestro compromiso, basado en una responsabilidad compartida, de adoptar un enfoque ambicioso y comprensivo a una administración de la migración segura, ordenada y humana. Esperamos poder seguir trabajando con socios en todo el continente americano para apoyar este objetivo”, explica la declaración.
La visón conjunta de los tres países es fortalecer y aumentar la protección a refugiados, solicitantes de asilo y migrantes en condiciones vulnerables a lo largo de la región de Norte América. También se enfatiza en la necesidad de crear programas que brinden protección y apoyo a grupos migrantes con mayores riesgos y a personas que ha sido víctimas de trata y tráfico de personas.
En cuanto a la migración legal, el comunicado explica lo siguiente: “Nos comprometemos a fortalecer las oportunidades para que los migrantes puedan acceder a nuestros países por vías legales, ya sea por trabajo estacional y temporal, reunificación familiar o protección humanitaria, incluyendo el reasentamiento”.
En este sentido, se busca promover vías migratorias mediante programas de movilidad laboral, especialmente en el sector agrícola.
“Invitamos a más países a que se unan a nosotros para enfrentar los retos de una migración sin precedentes por medio de un nuevo y más ambicioso pacto regional sobre migración y protección”, finaliza el apartado.
