Tras el anuncio emitido el pasado 24 de mayo por la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), sobre el padecimiento de varicela por parte de varios inmigrantes en el centro de detención ubicado en Eloy, Arizona, activistas y familiares hicieron un llamado a las autoridades para transportar y hospitalizar a todas las personas infectadas.

Según ICE, hay cuatro inmigrantes indocumentados infectados de varicela en este centro de detención y por lo menos otros 16 se encuentran bajo vigilancia médica ya que pudieron haber sido expuestos a esta enfermedad contagiosa.

Karyna Jaramillo, miembro de una comunidad de activistas, dijo que han estado en contacto con los infectados y están preocupados por su salud y estado mental.

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Asimismo, Adela, familiar de uno de los inmigrantes detenidos en este centro, dijo que su esposo se encuentra detenido en Eloy y le habló sobre el brote de varicela y las malas condiciones en las que viven. “Me dijo que el lugar está muy sucio y que solo están recibiendo una comida al día”, aseguró.

Por su parte, ICE aclaró que en ningún momento dijeron que las visitas han sido restringidas. A pesar de ello, la representante del Grupo Puente en Phoenix, Francisca Porchas, dijo que no cree en las cifras de ICE y está convencida de que son más de cuatro personas las infectadas con esta enfermedad contagiosa.

Francisca expuso que han “recibido varias llamadas de personas que no han podido ver a sus familiares”. La activista indicó que si ICE quiere ser realmente “transparente” con lo que pasa dentro de ese centro de detenciones debería permitir la entrada a una comisión especial para observar las condiciones y la situación en la que viven los inmigrantes detenidos.

Para la activista, este contagio de varicela es un eslabón más de una larga lista de problemas que enfrenta el centro de detención de inmigrantes indocumentados en Eloy.

Fuente: EFE