Este 4 de julio de 2016, Estados Unidos celebra el aniversario número 240 de su independencia del Imperio Británico. Los festejos toman forma de picnics, desfiles y fuegos artificiales en todo el país. Siendo un evento al que se unen millones de inmigrantes, sean indocumentados o no.
Aunque la coyuntura política y social que impera este 4 de julio no es la mejor para la comunidad indocumentada, ello no evita que los inmigrantes se unan al festejo. “Aunque algunos no nos quieran aquí, nosotros como indocumentados sí queremos este país y somos leales a él”, explica Maru Galván, inmigrante indocumentada de 47 años, originaria de la Ciudad de México.
“Mi esposo, mis hijas y yo siempre celebramos el 4 de julio, porque somos parte de este país”, asegura y agrega que “desde que llegamos nos integramos y aprendimos a celebrar, como lo hacían todos los ciudadanos”. Maru llegó proveniente de México, junto a su esposo y sus hijas, en el año 2000, en busca de un futuro mejor.
Maru y su familia no son los únicos indocumentados que celebran el 4 de julio, a pesar de tener su futuro en el país en un limbo. Al igual que la suya, cientos de familias se acostumbraron a decorar su casa con los colores azul, rojo y blanco, así como barras y estrellas.
Fermín Vásquez, indocumentado salvadoreño oriundo del municipio de Soyapango, comparte que en su hogar, el 4 de julio se celebra con fuegos artificiales. “Todos los años lo hacemos, es por mis hijos, debo enseñarles que es importante celebrar este día”, comenta haciendo referencia a sus tres hijos nacidos Estados Unidos.
Asimismo, organizaciones de activistas pro inmigrantes se unen a esta celebración, no sin antes demandar que los inmigrantes deben ser vistos como ciudadanos estadounidenses. “Es la historia inmigrante la que hace que este país sea grande”, expone Angélica Salas, directora de CHIRLA. “Es el racismo y el negarse a ver que el color de nuestra nación está cambiando lo que impide que se acepte al inmigrante como lo que es: un estadounidense”, subraya.
El centro de la celebración de este 4 de julio está a solo unas pocas calles de la Casa Blanca, en el edificio de los Archivos de la Nación, que es el hogar de la Declaración de la Independencia, documento escrito por Thomas Jefferson y adoptado por el Congreso el 4 de julio de 1776. Este 2016, Barack Obama será anfitrión por última vez como presidente.
Fuente: EFE, Mundo Hispánico, Voz de América