Una corte de apelaciones en Washington D. C. bloqueó temporalmente la norma del Departamento de Transporte que buscaba limitar qué inmigrantes pueden acceder a licencias para manejar camiones y autobuses.
Las nuevas reglas del Departamento de Transporte de Estados Unidos (DOT) que buscaban restringir el acceso de ciertos inmigrantes a licencias comerciales de conducir fueron detenidas tras una decisión de la Corte de Apelaciones del Distrito de Columbia. La regulación, presentada en septiembre, habría reducido significativamente el número de no ciudadanos elegibles para operar vehículos pesados como tráileres y autobuses.
El tribunal determinó que el gobierno federal no siguió los procedimientos adecuados al emitir la norma ni explicó de manera convincente cómo las restricciones propuestas mejorarían la seguridad vial. Según los jueces, los propios datos de la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes (FMCSA) muestran que, aunque alrededor del 5% de las licencias comerciales pertenecen a inmigrantes, estos conductores representan únicamente el 0.2% de los accidentes mortales registrados.
Las reglas anunciadas por el secretario de transporte, Sean Duffy, surgieron tras un accidente en Florida, donde un conductor sin documentos para permanecer en el país realizó un giro ilegal y provocó una colisión que dejó tres personas fallecidas. Ese caso llevó al DOT a revisar la emisión de licencias a no ciudadanos, especialmente en California, estado donde el conductor había obtenido su licencia. Una auditoría reciente reveló que miles de inmigrantes habían recibido licencias válidas por más tiempo que sus permisos de trabajo. Cabe destacar, que esta semana, California revocó 17 mil licencias comerciales por ese motivo.
La medida suspendida habría limitado la elegibilidad únicamente a inmigrantes con visas H-2A, H-2B o E-2 y requería que los estados verificaran el estatus migratorio de cada solicitante en una base de datos federal. Además, las licencias tendrían una vigencia máxima de un año o menos si el visado del conductor expiraba antes. Se estima que solo 10 mil de los aproximadamente 200 mil no ciudadanos con licencias comerciales actuales cumplirían con los nuevos requisitos. El resto conservaría su licencia solo hasta el momento de su renovación.
Además, Duffy ha retenido 40 millones de dólares en fondos federales al argumentar que California no está aplicando los requisitos de inglés para conductores, y advirtió que podría retener otros 160 millones si no se cancelan todas las licencias consideradas inválidas.