Conoce los documentos necesarios para comenzar el proceso de compra de una vivienda en Estados Unidos.
Comprar una casa en Estados Unidos implica reunir ciertos documentos que demuestran tanto la identidad del comprador como su estabilidad financiera. Si te interesa adquirir una vivienda, es necesario presentar una identificación personal válida, que puede ser un pasaporte, una licencia de conducir, o una tarjeta de identificación emitida por el gobierno. Si eres extranjero, es posible que se te solicite una visa vigente o tu Green Card, lo que facilita el acceso a servicios financieros como préstamos hipotecarios.
Por otro lado, la verificación de ingresos es otro de los aspectos clave en el proceso de compra de una vivienda en Estados Unidos. Durante esta etapa los prestamistas requieren comprobantes de ingresos recientes y declaraciones de impuestos de los últimos dos años, como los formularios W-2 o 1099. En el caso de quienes trabajan por cuenta propia, es necesario presentar estados financieros detallados sobre su negocio y las declaraciones de impuestos correspondientes. Estos documentos ayudan a demostrar la capacidad del comprador para realizar los pagos mensuales en tiempo y forma.
Además, el historial crediticio es un elemento relevante que los prestamistas revisan para evaluar el riesgo de otorgar un crédito. Un buen credit score puede facilitar la aprobación del préstamo, mientras que un historial con problemas podría hacer que los requisitos sean más estrictos. De igual manera, se suelen solicitar datos acerca de activos, como cuentas bancarias e inversiones, así como deudas existentes, para evaluar la estabilidad financiera y la capacidad de asumir una hipoteca.
Asimismo, es necesario demostrar que cuentas con los fondos suficientes para cubrir el pago inicial, que puede variar entre el 3% y el 20% del valor de la propiedad. De igual manera, deberás tener dinero disponible para los costos de cierre, que generalmente rondan el 2-5% del precio de la vivienda. Estos gastos adicionales incluyen tarifas legales, impuestos y otros costos relacionados con el cierre de la transacción.
Finalmente, es fundamental contar con un Número de Seguro Social (SSN) o un Número de Identificación Personal del Contribuyente (ITIN), especialmente si no eres ciudadano, pero declaras impuestos en Estados Unidos. Estos números permiten a los prestamistas verificar tu historial financiero y tu situación fiscal en el país.
Cabe destacar, que no existen leyes que impidan que los no ciudadanos, incluyendo inmigrantes sin documentos, compren una casa en Estados Unidos. Sin embargo, los inmigrantes indocumentados pueden enfrentarse a requisitos más estrictos para comenzar este proceso.