La administración del presidente Joe Biden, busca establecer una alianza con organizaciones no gubernamentales (ONG), dedicadas a temas de migración y Derechos Humanos, para identificar a las familias migrantes en situación de vulnerabilidad en México.
A principios del 2020, la administración anterior, estableció una política de salud pública llamada Título 42, que da facultades a funcionarios fronterizos de expulsar migrantes que se encuentren en la frontera entre México y Estados Unidos. Sin embargo, actualmente en el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), se encuentran trabajando en un sistema para identificar a familias migrantes y no dejar que sean expulsadas de Estados Unidos.
“Estamos trabajando para simplificar un sistema e identificar y procesar legalmente a personas particularmente vulnerables que justifican excepciones humanitarias bajo la orden”, dijo Sarah Peck, portavoz del DHS.
Además, reconoció el trabajo realizado por ONGs en México y otras organizaciones internacionales: “Este proceso de excepción humanitaria implica una estrecha coordinación con organizaciones internacionales y no gubernamentales en México y pruebas de covid-19 antes de que los identificados a través de este proceso puedan ingresar al país”.
Lee Gelerent, abogado en el litigio sobre esta orden de salud pública, explicó que el Titulo 42, cuenta con excepción humanitaria para personas especialmente vulnerables y que, gracias al trabajo de las ONG globales, el proceso ha funcionado de forma eficiente.
Por otra parte, la política que obligaba a solicitantes de asilo a permanecer en México hasta el momento de presentarse en una corte de inmigración en Estados Unidos, se ha visto modificada durante la actual administración, de igual forma gracias a la colaboración de organizaciones pro migración.