Los ciudadanos estadounidenses y los residentes de Estados Unidos, cuentan con derechos y obligaciones similares, sin embargo, las diferencias entre ambos también son importantes, como el derecho al voto, entre otros.
Existen diferentes formas para que extranjeros puedan vivir legalmente el Estados Unidos, ya sea a través de las distintas visas de trabajo que ofrece el gobierno, la obtención de la residencia legal permanente (LPR) o Green Card o la ciudadanía, obtenida a través de los padres o por naturalización.
La Green Card, usualmente se obtiene a través de un patrocinador, ya sea en empleador o un familiar, quienes solicitan la residencia permanente para una persona extranjera. En general hay tres principales maneras de obtener la residencia permanente: a través de un empleador; a través de un enlace familiar; o por solicitud de refugio o asilo. Asimismo, también existe la posibilidad de acceder a la Residencia Permanente Legal (LPR, por sus siglas en inglés) a través de la lotería de visas de diversidad.
Al obtener su Green Card, el ahora residente obtiene estatus oficial de inmigración en el país, por lo que tiene, obtiene ciertos derechos y responsabilidades. Como la oportunidad de trabajar y tener acceso a los programas de seguridad social.
La LPR, es parte del proceso para obtener la ciudadanía en Estados Unidos. Los residentes que cuentan con más de cinco años de haber conseguido su Green Card, tienen oportunidad de aplicar por la ciudadanía estadounidense.
La ciudadanía estadounidense se obtiene a través de la naturalización o a través de los padres. La US Citizenship and Immigration Services (USCIS) las define de la siguiente manera:
- Naturalización es el proceso por medio del cual se otorga la ciudadanía estadounidense a un ciudadano extranjero después que este haya cumplido con los requisitos establecidos por el Congreso de los Estados Unidos en la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA, por sus siglas en inglés).
- Adquisición de ciudadanía a través de padres estadounidenses al nacer y otra después de haber nacido, pero antes de cumplir los 18 años de edad.
Para aplicar a la ciudadanía estadounidense, por naturalización es necesario tener al menos 18 años, ser portador de Green Card, y cumplir con ciertos requisitos relacionados con la edad, estado civil y servicio militar.
Posteriormente, al completar el formulario N-4000 el aplicante debe presentarse en una cita para registrar las huellas dactilares y después presentar una entrevista y un examen. Estos son los pasos más importantes del proceso, ya que el aplicante debe aprobar una prueba de educación cívica y prueba de inglés (oral, lectura y gramática). Tras obtener la ciudadanía el ahora ciudadano estadounidense contará con los siguientes derechos y obligaciones:
- Derecho a recibir protección de Estados Unidos.
- Derecho a votar en Estados Unidos.
- Derecho a trabajar en Estados Unidos.
- Derecho a vivir permanentemente en Estados Unidos.
- Obligación de obedecer las leyes de Estados Unidos.
- Obligación de declarar impuestos.
- Obligación de inscribirse en el Sistema de Servicio Militar Selectivo si es varón y tiene entre 18 y 25 años de edad.
La principal diferencia entre la ciudadanía y naturalización con la residencia permanente o Green Card, es que los ciudadanos pueden vivir en el extranjero el tiempo que quieran. Las personas con residencia permanente, por su parte, deben cuidar el tiempo fuera de territorio estadounidense, de lo contrario pueden perder la residencia.
Otra de las diferencias importantes es que la ciudadanía es permanente y no es necesario un proceso de renovación, a diferencia de la Green Card, que debe renovarse cada diez años. Además, la residencia es el camino para convertirse en ciudadano estadounidense.