Esta semana, tanto el gobierno de Estados Unidos como diversas organizaciones pro inmigrantes han advertido a los indocumentados que no crucen el desierto de Arizona, pues se prevén temperaturas hasta de 120 grados Fahrenheit (48.8 centígrados), convirtiendo esta zona en un verdadero infierno.
Kat Rodríguez, de la organización Colibrí en Tucson, Arizona, comenta que se encuentran “alarmados por la ola de calor. Esto complica el cruce por el desierto y muchos indocumentados correrán peligro de muerte".
Kat comparte que a su agencia lamentablemente le toca una labor poco grata. “Nuestro trabajo consiste en ubicar personas, contactar a familiares cuando hallamos cuerpos. Trabajamos de cerca con los consulados para verificar identidades”, narra, y es por ello que se une a los llamados para advertir a la comunidad de inmigrantes indocumentados sobre los peligros de cruzar la frontera por este lugar.
Asimismo, el registro de altas temperaturas en la frontera entre Arizona y México ha llevado a las autoridades federales estadounidenses a extremar las medidas de precaución para evitar tragedias. La Patrulla Fronteriza señaló que en el sector de Yuma -uno de los más transitados por inmigrantes- se esperan temperaturas cercanas a los 120 grados Fahrenheit (48.8 centígrados).
La Patrulla Fronteriza dijo que permanece en alerta y aumentó “los procedimientos enfocados en la protección de la seguridad de la comunidad fronteriza y las personas que cruzan”. También agregó que las unidades de búsqueda y rescate “centran esfuerzos en las áreas remotas del desierto de Sonora, donde las posibilidades de supervivencia son escasas para los que cruzan la frontera debido al entorno aislado y peligroso".
La agencia reiteró que el cruce en el sector de Yuma “podría resultar en una tarea fatal”, y detalló que la caminata en algunas áreas demora días o semanas para llegar a cualquier zona poblada. “El peligro es aún más evidente cuando las temperaturas del verano se disparan”, expuso, y precisó que es prácticamente imposible que un migrante cargue el agua suficiente “para sobrevivir durante días mientras cruza el desierto”.
Cabe señalar que el 1 de junio, el Servicio Nacional Meteorológico lanzó una alerta de calor excesivo para la zona de la frontera de Arizona, incluyendo Yuma y la ciudad de Lake Havasu, además de pasos en la frontera con México. Por ello, consulados mexicanos en la frontera están recomendando a la población en general evitar la exposición al sol por largos períodos de tiempo además de actividades recreativas al aire libre.
Finalmente, la organización Ángeles de la Frontera, que instala estaciones de aprovisionamiento para inmigrantes en el desierto, dijo que es importante que los inmigrantes sepan que no vale la pena intentar el cruce en esta temporada. “No deben arriesgar sus vidas” dijo la organización a través de su director, Enrique Morones. “Por favor díganle a sus familiares que no arriesguen, que hace mucho calor”, concluyó.
Fuente: Univisión