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Acceso Latino

Después de un aumento en la demanda de ayuda para navegar por el sistema de inmigración de Estados Unidos desde que el nuevo presidente asumió el poder, México ha lanzado un programa sin precedentes de 50 millones de dólares para expandir los servicios en sus 50 consulados estadounidenses.

Por su parte, el Consulado mexicano en Austin planea gastar 260 mil dólares para organizar 60 eventos de derechos humanos, seis clínicas de naturalización, 900 consultas individuales de inmigración y cuatro sesiones de preparación para emergencias, tratando temas desde cómo manejar las disputas de custodia de menores hasta enfrentar la deportación.

“Hay una nueva administración a nivel federal que aboga por algunas políticas contra la inmigración que han creado un clima de ansiedad en diferentes regiones del país, en particular en Texas”, dijo Carlos González Gutiérrez, cónsul general de México en Austin. “Esta campaña especial para la asistencia consular es una respuesta directa a este nuevo clima”.

Durante los primeros 100 días de gobierno, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), arrestó a más de 41 mil personas, un aumento del 38 por ciento en el mismo período en 2016, según la agencia.

Aunque el presidente ha dicho que su administración centrará los esfuerzos de aplicación de la ley en “hombres malos” con antecedentes criminales o lazos de pandillas, el número de inmigrantes detenidos que no tienen antecedentes penales se ha duplicado en el mismo período, a unos 11 mil.

La ansiedad ha aumentado para los inmigrantes mexicanos que permanecen en Texas sin permiso legal, dijo González Gutiérrez, debido a la aprobación de la Ley 4 del Senado, la nueva normativa estatal que prohíbe las llamadas ciudades ‘santuario’. La ley, que está siendo impugnada en un tribunal federal, entrará en vigor el 1 de septiembre si no se retrasa.

Por su parte, el gobierno mexicano dijo que sus 11 consulados en Texas vieron un aumento de casi 60 por ciento en las solicitudes de servicio después de que la Legislatura aprobó la medida, de 585 solicitudes en las seis semanas previas a la primera semana de mayo a 926 en las siguientes seis semanas.

González Gutiérrez dijo que el consulado trabajará con la diócesis católica de Austin para realizar talleres en parroquias que ofrecen misa en español y con la sólida red de organizaciones sin fines de lucro del área, como el Centro de Refugiados e Inmigrantes para Educación y Servicios Legales de San Antonio (RAICES, por sus siglas en inglés).

“Hay ataques sin precedentes en las comunidades de inmigrantes a nivel estatal y federal, y la mensajería a la comunidad de inmigrantes está trabajando para inculcar una sensación de miedo”, dijo Amy Fischer, directora de políticas de RAICES. “Somos capaces de combatir algo de ese miedo a través de la educación y la preparación de la comunidad”.

La necesidad de servicios legales es especialmente aguda para los inmigrantes, que a menudo son pobres y a diferencia de los acusados ​​en el sistema de justicia penal no se garantiza un abogado en los procedimientos de deportación, dijo Fischer.

“Al final del día, no importa dónde nazcas, tienes acceso y el derecho al debido proceso”, dijo Fischer.

Fuente: Mundo Hispánico

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