Los centros de detención de inmigrantes que pertenecen al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) ubicados en Karnes City y Dilley, Texas, podrían necesitar licencias para el cuidado y albergue de niños, medida que actualmente es estudiada por el estado.

Ambos centros de detención para inmigrantes ubicados en Texas están siendo afectados por un fallo judicial que obliga a liberar a los menores de edad. Estos dos centros abrieron durante la oleada de inmigrantes indocumentados de 2014 con el fin de disuadir nuevas llegadas, aunque están gestionados por empresas privadas.

El pasado 9 de diciembre el Departamento de Protección y Servicios para la Familia de Texas celebró una audiencia pública para valorar la posibilidad de pedir licencia para el cuidado de los menores, a la que acudieron abogados y organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes y de la infancia.

Virginia Raymond, abogada especializada en asuntos migratorios, dijo “que la agencia encargada del cuidado de los menores en Texas permita que las fuerzas de seguridad y las empresas privadas confinen a menores, cuando la razón de ese confinamiento no es la salud o el bienestar del menor, constituye un abuso”.

Durante la audiencia, Laura Guerra-Cardus, del Fondo de Defensa Infantil de Texas, afirmó que “encerrar a niños en centros de detención no puede calificarse de ningún modo como ‘cuidado de menores’”.

Todos los participantes de la audiencia denunciaron que el Departamento de Protección y Servicios para la Familia de Texas ha suavizado recientemente los requisitos para otorgar este tipo de licencias y favorecer, precisamente, a los centros de Karnes City y Dilley.

De acuerdo con Laurie Cook-Heffron, profesora de Trabajo Social en la Universidad de Texas, “aún con la reducción de los estándares mínimos, estos centros siguen sin ser espacios adecuados para albergar a menores”.

Los dos centros de detención en Texas han sido objeto de polémica desde que abrieron por continuas denuncias de abusos y malos tratos a los inmigrantes. Entre ambos centros tienen capacidad para cerca de 3 mil internos; en la actualidad hay cerca de mil 500, en su mayoría provenientes de Centroamérica.

Fuente: Univisión