Guatemala se ha rehusado a intervenir en la crisis de los cerca de 3 mil inmigrantes cubanos que se encuentran varados desde el mes pasado en Costa Rica ante el cierre de la frontera por parte de Nicaragua.
Medios oficiales aseguraron que el gobierno de Guatemala confía en que esta crisis “no tense” las relaciones en Centroamérica. Alejandro Maldonado Aguirre, presidente guatemalteco, hizo declaraciones sobre el tema tras concluir la Cumbre del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), efectuada en la cancillería de El Salvador.
“Para nosotros es de mucha preocupación el tema; atendimos la solicitud de que hubiese una respuesta solidaria centroamericana, ante eso nuestra respuesta no podía ser de otra manera”, expresó Maldonado Aguirre y aclaró que atender el problema de los inmigrantes cubanos varados en Costa Rica “tiene limitaciones legales” por las estrictas normas en materia de migración que existen en muchos países del área.
De acuerdo con el gobernador,“no podemos trasladar un problema de un país a otro país, sin tener la seguridad de que no se vuelva una situación inmanejable”. Asimismo aseveró que no se podía hablar de una crisis humanitaria ni de derechos humanos, debido a que los inmigrantes cubanos salieron de un país que no está en guerra, no son perseguidos políticos y tampoco víctimas de un desastre natural.
“Yo no veo inconveniente en que, si no pudieron pasar las fronteras (para llegar a Estados Unidos), puedan regresar a su país”, de donde salieron con documentos legales, añadió y sostuvo que pese a todo “hay buena voluntad” para atender el tema de los inmigrantes y desestimó que la crisis pueda crear tensiones o afectar el proceso de integración en Centroamérica.
El SICA está conformado por Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá y República Dominicana, además de contar con varios países que fungen como observadores.
Fuente: CNN, Notimex
