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Inmigrantes indocumentados en EE UU no disfrutan de fiestas navideñas

De acuerdo con el doctor Jairo Gómez, psiquiatra del Hospital White Memorial, en Los Ángeles, durante las festividades de fin de año, el nivel de depresión y la cantidad de personas en general que sufren de depresión aumenta significativamente; sin embargo se nota más en los inmigrantes indocumentados, pues no pueden visitar a sus familiares en sus países de origen.

Al carecer de documentos que les permitan tener un estatus migratorio legal en Estados Unidos, los inmigrantes indocumentados no pueden visitar a sus familiares en sus países de origen, pues de hacerlo nada les asegura que puedan volver a ingresar al país norteamericano.

Según el doctor Gómez, existen dos clases de depresión durante esta época de fiestas en los inmigrantes indocumentados. La primera es una depresión relacionada con la falta de sus familiares; la persona se siente triste y con nostalgia al no pueden estar con sus seres queridos. La segunda es la depresión debido a que los días son más cortos y la falta de luz afecta a las personas, sostiene el especialista.

“Lo que puede ocurrir, y ocurre con frecuencia, es que se juntan las dos clases de depresión y a eso se le agrega que como inmigrantes indocumentados a veces no pueden viajar“, explicó el doctor.

Por su parte, Guadalupe García, gerente administrativa del programa de jornaleros del Instituto de Educación Popular del Sur de California (IDEPSCA), dijo que especialmente en diciembre esta organización realiza actividades en los centros de jornaleros para ayudar a contrarrestar la soledad y depresión que muchos inmigrantes indocumentados sienten durante esta época.

García expone que “los niveles de depresión aumentan. Hay muchos jornaleros que viven en la calle o en albergues, y encima de esto, muchos le ocultan su realidad a sus familiares en sus países de origen para que no se preocupen. Esto incrementa el nivel de tristeza y soledad que sienten al no poder compartir la verdad de su situación”.

“Nosotros hacemos diferentes actividades para ellos, les damos comida y realizamos colectas para darle juguetes a sus hijos. Muchos nos han dicho que esta es la primera vez que se sienten en familia”, añadió García.

Fuente: La Opinión

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