El número de niños inmigrantes que arriban a Estados Unidos ha ido en aumento durante los últimos años. Del 1 de octubre de 2014 al 30 de septiembre de 2015, la Patrulla Fronteriza ha detenido a 26 mil 685 niños indocumentados no acompañados.
Sin embargo, el viaje es sólo una parte del problema, pues cuando los niños indocumentados llegan a Estados Unidos, deben presentar su historial médico para poder ser inscritos en alguna escuela.
Este aumento de niños inmigrantes ha sido notorio en las instituciones de salud. De acuerdo con la doctora Beatrice Germain, de la Clínica St. John’s en Los Ángeles, California, “Vistos los números que se han presentado entre enero y junio de este año, pensamos que vendrán más de tres mil niños durante 2015”.
Según la doctora, las clínicas comunitarias de Los Ángeles han visto un incremento de casos de niños inmigrantes indocumentados que llegan a las clínicas presentando estrés, debido al viaje, y algunos con casos de asma.
Actualmente, en California, las opciones de cuidado médico para inmigrantes indocumentados son limitadas, pero existen programas de salud a los que pueden acceder sin importar su situación migratoria.
Una de estas instituciones es la Clínica Monseñor Romero. “Los niños necesitan esa atención médica de forma inmediata”, señala Carlos Baquerano, miembro de la clínica. Debido a que más menores están asistiendo a las clínicas, diversas centros médicos se han reunido para formar una coalición y ofrecer sus servicios a bajo costo.
Sandra Rosato, de la Clínica Monseñor Romero afirma: “Tenemos que asegurarnos que los niños no traigan enfermedades que no se hayan podido identificar en los centros de detención”.
Las clínicas siguen analizando la situación para tratar de encontrar los fondos necesarios para ayudar a los niños inmigrantes indocumentados, pero reconocen que no es fácil.
Fuente: CNN en español