Políticos y activistas están atentos a los anuncios de Trump y varios coinciden en que sus primeras movidas no revelan un buen panorama.
Ha pasado casi una semana desde que Estados Unidos eligió a Donald Trump como el próximo huésped de la Casa Blanca, y en medio de los primeros anuncios hechos por el mandatario electo y el miedo que reina entre muchos neoyorquinos, líderes políticos insisten en que defenderán a capa y espada a los inmigrantes.
Así lo anunció el gobernador Andrew Cuomo, quien advirtió que Nueva York seguirá siendo un refugio para los inmigrantes. “No permitiremos que un gobierno federal que ataque a los inmigrantes lo haga en nuestro estado”, dijo, al tiempo que destacó estar en pie de lucha.
“Yo lucharé contra el ataque a los musulmanes, los inmigrantes, la comunidad LGBT, y por los derechos de todos los estadounidenses cada día que esté en mi cargo y todos los días después de eso”, manifestó el gobernador, en una carta dirigida a los neoyorquinos.
En la misiva Cuomo advirtió que hay que darle la oportunidad a Trump de gobernar, pero recalcó que si promueve ideas que vayan contra los principios del pueblo estadounidense, será necesario ponerle freno.
“Mientras honramos a Estados Unidos, honrando los resultados de las elecciones, lucharemos tan ferozmente como podamos, en cada oportunidad que se presente, para rechazar las actitudes de odio que reinaron durante la campaña del 2016”, dijo.
“No podemos oír lo que hemos estado escuchando. Voces del KuKluxKlan, nacionalismo blanco, autoritarismo, misoginia y xenofobia. Una visión generalmente despreciativa de los ideales americanos”.
Por su parte, el alcalde Bill de Blasio, quien la semana pasada ya había anunciado su compromiso de proteger por igual a los inmigrantes que tengan o no tengan papeles, reiteró que trabajará desde diferentes flancos si el gobierno de Trump quiere cometer abusos.
Fuente: El Diario NY.
