El Día del Padre es un día muy especial en el que los hijos celebran a esos hombres que dedican su vida a formar una familia y a ser un pilar muy importante de esta institución tan importante, pero, ¿qué sucede cuando por la situación migratoria de las familias los padres y los hijos hace que vivan separados?
El Parque de la Amistad, que es un lugar ubicado en la frontera entre México y Estados Unidos es el lugar en el que generalmente se encuentran los familiares y seres queridos que se encuentran separados por su situación migratoria y ayer que fue Día del Padre fue el punto de reunión entre las familias que se encuentran divididas por una orden de deportación.
Una de esas familias fue la familia Castillo conformada por 30 miembros que se congregaron frente a la malla que divide el Parque de la Amistad y la familia dividida a ambos lados de la frontera conmemoraron este día.
Salvador Castillo viajó de Michoacán hasta Tijuana para encontrarse con su hija Lucrecia a quien vio por primera vez en 14 años. Lucrecia se trasladó desde Denver hasta este parque especialmente para saludar a su padre.
Cabe resaltar que a pesar de que las diversas familias congregadas compartieron risas y anécdotas la valla metálica les impidió tener contacto físico o compartir alimentos.
Otra persona que llegó para compartir con su familia al Parque de la Amistad fue Ponciano Méndez, quien tras vivir 25 años en la localidad de El Cajón, California fue repatriado a México en enero pasado.
La situación migratoria de las personas en Estados Unidos ha provocado que las familias se dividan, por eso es importante acudir con un abogado de migración para evitar llegar a este tipo de situaciones.
Fuente: La Opinión