Dos jóvenes guatemaltecos sirven a la comunidad de Houston en plena pandemia ganándose la confianza y el cariño de sus clientes.

Rigoberto Vásquez y Pascual Sapon son electromecánicos y reparan el sistema eléctrico de los automóviles. Apenas hace año y medio abrieron un taller donde apretaban bujías, pero gracias a su arduo trabajo, han llegado muy lejos.

“El hambre de poder ser diferentes, el hambre de poder demostrar a los demás que podemos, que se puede hacer”, dijo Pascual.

El taller tuvo problemas cuando empezó la pandemia y tuvieron que pedir asistencia federal. “Nos aprobaron hasta US$14,500 que usé para pagar a nuestros empleados porque en realidad sí lo ocupábamos, la verdad”, comentó Rigoberto.

Pascual es dreamer y Rigoberto llegó al país hace 13 años, y nunca se olvida de sus padres mandándoles a la semana por lo menos US$250.

Son famosos por componer lo que parece prácticamente imposible, incluso hasta los autos más sofisticados. “Por el tipo de experiencia que llevamos, le podemos encontrar el problema un poco más rápido, podría decir, y entonces esto ha hecho eco poco a poco”, explica Pascual.

El taller ha sido tan popular que a veces no pueden atender a las personas tan rápido como querrían, pero sobre todo, destacan por ser honestos y por su excelente trabajo.

Fuente: Noticias Telemundo