Estudiantes se han manifestado en diversas universidades de California por temor a deportaciones.
Ante el anuncio de posibles deportaciones masivas durante el segundo mandato del presidente Donald Trump, estudiantes en California han alzado la voz para exigir mayor protección en sus campus. Manifestaciones en universidades como UC Berkeley, Sacramento State y Cal State Northridge demuestran la incertidumbre y preocupación de la comunidad estudiantil de California, que cuenta con un importante porcentaje de alumnos migrantes o de familias con estatus migratorio mixto.
En Cal State Northridge (CSUN), alrededor de 300 estudiantes se reunieron con pancartas y consignas a favor del empleo y la educación y en contra de las deportaciones masivas. Asimismo, mostraron carteles en contra de la presencia de elementos del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). Según datos del Equity Research Institute, cerca de 100 mil universitarios en California carecen de estatus migratorio permanente, y 3.3 millones de personas en el estado viven en hogares con estatus mixto.
Karisma Ramos Ayala, estudiante de escritura creativa en CSUN, contó su experiencia: “No creo que ICE deba estar cerca de escuelas o universidades. La gente está aquí para educarse, y no podemos permitir que nos lo arrebaten”.
En enero, la administración Trump derogó una política que prohibía arrestos migratorios en escuelas, iglesias y otros lugares considerados “sensibles”. Aunque aún no se han reportado operativos en campus universitarios, los estudiantes viven en incertidumbre.

Por otro lado, el fiscal general de California, Rob Bonta, emitió directrices claras sobre esta situación: ICE puede ingresar en áreas públicas como parques y bibliotecas, no así en espacios privados como viviendas estudiantiles o aulas restringidas. Para ello es necesaria una orden judicial.
Asimismo, las universidades han reforzado sus protocolos. La UC, la CSU y colegios comunitarios prohíben a sus policías colaborar con ICE, de acuerdo con la ley estatal de 2017. Además, los Centros “Dream” ubicados en los diferentes campus universitarios ofrecen asesoría legal, salud mental y recursos financieros para estudiantes.
Por su parte, los estudiantes tienen tres exigencias clave:
- Declarar los campus como “santuarios” y prohibir el acceso a ICE
- Mayor financiamiento para recursos legales y apoyo a estudiantes indocumentados
- Sistemas de alerta ante la presencia de agentes migratorios
Aditi Hariharan, presidenta de la Asociación de Estudiantes de la UC, criticó la falta de empleo en campus para indocumentados: “La UC debe demostrar su apoyo, o será difícil crear un ambiente seguro” Asimismo, Amy Bentley-Smith, portavoz de Cal State, afirmó que “Nuestros campus están comprometidos con la seguridad de todos los estudiantes, sin importar su estatus”. Mientras, la UC destacó sus programas de asesoría legal y apoyo financiero.
Algunos grupos conservadores, como en Cal State Long Beach, respaldan las deportaciones, argumentando que las universidades no deben ser santuarios. Este debate ha generado tensiones, con enfrentamientos entre manifestantes y contramanifestantes
La profesora Rosa Rivera Furumoto de CSUN destacó la importancia de la resistencia estudiantil: “Estamos en una situación aterradora, y necesitamos levantarnos”. Con el aumento de las políticas migratorias restrictivas, las universidades de California se convierten en un frente clave para la defensa de los derechos de los migrantes.