Un magistrado federal decretó el 13 de noviembre de 2019 en San Diego, California, que los migrantes que pidan asilo en el país y están por ser devueltos a México, podrán tener acceso a abogados migratorios.

El juez Dana Sabraw votó a favor de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) y otras dos organizaciones no lucrativas pro inmigrantes, que en días pasados presentaron una demanda colectiva.

El magistrado resolvió que todos los inmigrantes deben tener un abogado que les asesore durante las “entrevistas no devolutorias” con el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés).

Edward Sifuentes, portavoz de ACLU explicó a la agencia de noticias Efe, que este tipo de entrevistas son adicionales al proceso normal y ya las lleva acabo la agencia migratoria.

Estas audiencias comienzan cuando los inmigrantes expresan su miedo de regresar a México; durante las entrevistas con los agentes de inmigración deben demostrar que el miedo es creíble y así poder solicitar asilo.

Este beneficio para los indocumentados es una orden de restricción temporal a la Agencia y garantiza a los solicitantes de refugio un abogado que loayude a prepararse para las entrevistas en las que explican sus razones para permanecer en la Unión Americana sin tener que recurrir al Protocolo de Protección a Migrantes (MPP, por sus siglas en inglés).

La abogada en derechos de los inmigrantes de ACLU, Monika Langarica declaró “la decisión del juez es una victoria para nuestros demandantes y ahora tienen el derecho a un abogado, esto representa un sistema de inmigración justo y equitativo”.

Fuente: La Opinión