Grandes noticias llegaron para los indocumentados en Denver, Colorado, pues la ciudad anunció que destinará 377 mil dólares para proveer abogados a los migrantes residentes, incluidos aquellos con una orden de deportación pendiente.

El proyecto conocido como Fondo de Servicios Legales para Inmigrantes de Denver fue aprobado en 2017 por el alcalde Michael Hancock, sin embargo, carecía de fondos para operar.

Entre otras cosas, el programa brindará asistencia legal a las víctimas de crímenes, así como apoyos a las familias afectadas por las deportaciones.

Para otorgar este tipo de ayudas, la ciudad Denver se asoció con organizaciones para ayudar por medio de representación legal sin costo a “personas elegibles” ya detenidas por su situación inmigratoria y con orden de deportación, que estén gestionando su ciudadanía o hayan pedido asilo o que estén en el proceso de renovar su Acción Diferida (DACA).

Denver trabajará con la Red de las Montañas Rocosas de Defensa de Inmigrantes (RMIAN); Ministerios Mile High, que opera un centro de ayuda para temas legales; Servicios Familiares Luteranos, enfocado en la renovación de DACA, y la Facultad de Abogacía de la Universidad de Denver con el objetivo de capacitar a abogados interesados.

La orden ejecutiva de Hancock que creó el Fondo de Servicios Legales para Inmigrantes establece que el proyecto concluirá el 20 de enero de 2021, último día del mandato del actual presidente de Estados Unidos.

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