Larissa Martínez, estudiante mexicana de 18 años de edad, sorprendió a gran parte de Estados Unidos al decir que es indocumentada durante su discurso como alumna más destacada de su generación en la McKinney Boyd High School, en Texas.
“Soy una de los 11 millones de indocumentados que viven en las sombras en Estados Unidos y he decidido hoy pararme frente a ustedes y revelar estas inesperadas realidades, porque ésta tal vez sea mi única inoportunidad de mostrarles mi realidad a todos ustedes, que los inmigrantes indocumentados somos también gente”, dijo la joven durante su discurso.
“También somos gente, como ustedes. Estamos aquí sin documentación porque el sistema de inmigración de Estados Unidos está roto y obliga a muchas familias a vivir en el miedo”, ahondó Larissa, provocando un fuerte aplauso por parte de los estudiantes, maestros y padres de familia que estaban presentes.
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Larissa nació y creció en la Ciudad de México y emigró a Estados Unidos cuando tenía 12 años. La joven estudiante obtuvo uno de los promedios más altos de su generación, y, además de su mensaje, aprovechó la ocasión para agradecer a su madre por los esfuerzos que ha hecho para proveer lo necesario y mantener a su familia.
“Muchos de ustedes me ven de pie aquí y asumen que mi vida debe ser bastante estupenda y que mis padres deben estar muy orgullosos. Sin embargo, es importante tener en cuenta que estos son sólo verdades a medias”, puntualizó y agregó que su realidad “es muy diferente”.
“El 11 de julio se cumplirán exactamente seis años desde que me mudé a McKinney (Texas) desde la Ciudad de México donde nací y crecí. La escuela se convirtió en mi salvadora”, declaró, al indicar que a los 12 años tuvo que sacrificar parte de su infancia para cuidar de su hermana, mientras su madre trabajaba desde la mañana hasta la noche.
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“A pesar de no tener internet, una lavadora, o incluso mi propia cama, siempre tuve el conocimiento a mi alcance en la biblioteca de la escuela. Siento que les debía a todos ustedes el ser honesta y que me lo debía a mí misma”, concluyó.
Larissa, junto a su madre y hermana, cruzó la frontera con visa de turista. Las tres se asentaron en un pequeño departamento de una recámara en McKinney, un suburbio al norte de Dallas.
Antes de que pronunciara su emotivo discurso, Larissa ya había recibido el ofrecimiento de una beca completa para continuar sus estudios en la Universidad de Yale, considerada una de las ocho mejores universidades en Estados Unidos y una de las mejores del mundo.
Fuente: Notimex, Breitbart