Rentar vs comprar casa: opciones para inmigrantes en Estados Unidos

mayo 29, 2025

En EE.UU. la renta promedio de una vivienda ronda los 1,600 dólares, mientras que vivienda promedio tiene un costo de 682 mil dólares.

Comparar los beneficios y desafíos de rentar o comprar una vivienda en Estados Unidos puede ayudarte a tomar una decisión financiera más informada y acorde con tus necesidades personales y familiares. Por ejemplo, conocer datos sobre costos de vivienda en tu zona o el promedio de las rentas mensuales en la ciudad donde vives, pueden ayudarte a tomar una mejor decisión.

Existen diferencias importantes entre rentar o adquirir una vivienda propia. Una renta evita grandes responsabilidades que conlleva ser propietario de una vivienda, además permite una mayor flexibilidad en los planes a futuro. Mientras que contar con una vivienda propia también representa una inversión importante e incluso puede representar un activo si esta incrementa su valor con el tiempo.

En Estados Unidos, la renta promedio de una vivienda ronda los 1,600 dólares, mientras que la vivienda promedio tiene un costo de 682 mil dólares, por lo que la decisión sobre una opción u otra depende en gran medida en tu situación financiera y tu estilo de vida. En los beneficios intangibles tener una casa propia genera sentimientos de estabilidad y en términos tangibles se encuentran las deducciones de impuestos. Asimismo, rentar no significa desperdiciar dinero cada mes, ya que contar con una vivienda propia no siempre funciona como una estrategia para generar riqueza a largo plazo.

Rentar una vivienda puede significar una mayor flexibilidad para cambiar de trabajo o de ciudad, además las reparaciones corren a cuenta del propietario. En cambio, una vivienda propia genera arraigo y estabilidad. No obstante, una renta puede subir conforme pasen los meses y el propietario puede vender la vivienda cuando lo desee, asimismo, ser propietario significa mayor gasto en reparaciones y mantenimiento.

Además, una vivienda propia contribuye capital. El capital es la diferencia entre el precio al que pude ser vendida la casa y lo que aún resta por pagar. Mientras se pague la hipoteca el capital aumenta. Además, el capital se convierte en un activo real, por ejemplo, al obtener un préstamo puedes obtener mejores opciones si cuentas con capital importante. Eso también permite acceder a tasas de interés más bajas. En este sentido, la calificación crediticia también es otro de los beneficios de comprar una vivienda y realizar los pagos de hipoteca a tiempo. Por otro lado, los intereses hipotecarios son deducibles de impuestos.

A pesar de los beneficios, los altos costos de vivienda, y especialmente los costos iniciales, hacen que adquirir una vivienda no forme parte de los planes de muchas personas. Por ejemplo, el enganche para una vivienda en Estados Unidos puede ser de 20%, para una casa de 500 mil dólares, lo que equivale a 100 mil dólares, una cantidad considerables.

A diferencia de adquirir una vivienda, rentar no afecta la puntuación crediticia y tampoco genera valor ni capital. No obstante, los principales beneficios de rentar son los bajos costos en general, tanto los iniciales como los de largo plazo. Mientras que el enganche de una vivienda puede ser de 100 mil dólares, el gasto total de una renta promedio en Estados Unidos en un año no alcanza esa cantidad.