El gobernador de Colorado, Jared Polis, firmó una orden para hacer más fácil la integración de inmigrantes en el estado, así como quitar las barreras que frenan tal proceso.
Esta iniciativa tiene como nombre Nuevos Estadounidenses y su labor es analizar los problemas, qué les impiden a los inmigrantes a lograr el éxito e identificar cuáles son las soluciones legislativas y administrativas para ayudarles a una mejor integración a la sociedad norteamericana.
En un comunicado de prensa, la coordinadora del programa para refugiados en el Departamento de Servicios Humanos de Colorado, Kit Taintor dijo: “”Remover las barreras que los inmigrantes enfrentan para acceder a cuidados de niños, a licencias ocupacionales y a educación hará que Colorado sea un lugar más acogedor y próspero para los nuevos estadounidenses”.
Al mismo tiempo, el Gobierno estatal inició la formación de equipos de asesores legales y asignó funcionarios públicos para empezaran a trabajar.
Nuevos Estadounidenses trabajará como una organización sin fines de lucro y tiene el apoyo del Departamento de Trabajo y Empleo de Colorado.
Según un estudio de New American Economy (NEA) los negocios a cargo de inmigrantes en Colorado generan cada año un ingreso de $16,700 millones de dólares en ventas y dan empleo a más de 100 mil personas.
En Colorado viven aproximadamente 600 mil inmigrantes, que es el 10 % de la población, de acuerdo con información del Buró del Censo.
Colorado se unió a Michigan, Nevada y Ohio, estados que ya cuentan con oficinas que ayudan a los inmigrantes a integrarse al mundo laboral y otros servicios.
El gobernador aseveró que los inmigrantes, “aportan valores y fortaleza a nuestras comunidades”.
Fuente: eldiario.es
