El pasado jueves 18 de marzo, 2021, la cámara votó 228-197 para aprobar la Ley de Promesa y sueño Americano. Esta promesa se aprobó previamente en la Cámara en 2019, y creó un proceso para que los inmigrantes indocumentados traídos a los Estados Unidos cuando eran niños, también conocidos como Dreamers, obtengan el estatus de residente permanente y la ciudadanía eventual. También incluye un camino hacia la ciudadanía para personas con estatus de protección temporal y beneficiarios de salida forzada diferida.
La recién aprobada Ley de Promesa y sueño Americano de 2021 es un primer paso fundamental para reformar el sistema de inmigración del mandato del presidente Joe Biden, pues dará el alivio que tanto necesitan a los titulares de Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), los beneficiarios de Salida Forzada Diferida y los Dreamers, los jóvenes que vinieron aquí cuando eran niños y no conocen otro país, otorgando un camino hacia la ciudadanía para personas con estatus de protección temporal y beneficiarios de salida forzada diferida.
Así mismo, la Cámara aprobó la Ley de Modernización de la Fuerza Laboral Agrícola, que permitirá a los trabajadores agrícolas, y a sus cónyuges e hijos, obtener un estatus legal a través del empleo continuo en el sector agrícola. También modificaría el programa de trabajadores agrícolas invitados con la visa H-2A.
Como panorama general es importante tener en mente que el pasaje se produce cuando la administración de Biden lucha con el creciente número de niños migrantes no acompañados que llegan a la frontera sur. Por lo que la Patrulla Fronteriza refirió a 321 niños por día a la custodia del departamento de Salud y Servicios Humanos en la semana que terminó el 1 de marzo, según documentos obtenidos por Axios.
La administración de Biden espera trabajar junto con el Congreso para hacer lo correcto por los Dreamers y los titulares de TPS que contribuyen al país, buscando construir un sistema de inmigración del siglo XXI que se base en la dignidad, la seguridad y la justicia, y finalmente promulgue el soluciones a largo plazo que necesitan para crear un sistema de inmigración ordenado y humano, abordar las causas fundamentales de la migración a los Estados Unidos y crear un camino hacia la ciudadanía para la población indocumentada en los Estados Unidos.
La legislación prevé que hasta 4,4 millones de personas sean elegibles para la residencia permanente, según el Instituto de Política Migratoria.
